Monografias.com > Sin categoría
Descargar Imprimir Comentar Ver trabajos relacionados

La enfermedad mental: un concepto anticuado (página 2)



Partes: 1, 2

1. Alteraciones involuntarias de conducta(por
ejemplo alucinaciones, depresión,
euforia, confusión, pérdida de la memoria y
de la orientación temporo-espacial, y cambios importantes
de la conducta o la
personalidad) por enfermedades endocrinas,
infecciosas, metabólicas, neurológicas o de otro
tipo. Pero estas no son enfermedades mentales sino
médicas.

2. La locura, ahora llamada esquizofrenia, o
paranoia , o psicosis, u otro
término psiquiátrico. La literatura sobre la
esquizofrenia, considerada la más grave de las tales
enfermedades mentales comprende ahora miles de publicaciones que
adolecen de un serio error epistemológico: hablar de la
esquizofrenia como si fuese una enfermedad genuina como la
diabetes cuando,
en realidad, se trata de un insulto psiquiátrico que
justifica el internamiento forzado de los locos.

Por otra parte, los psiquiatras llevan un siglo alegando que
la esquizofrenia es, en realidad, una enfermedad cerebral. Si es
así, ¿por qué sigue siendo definida como una
enfermedad mental y tratada por psiquiatras en vez de por
neurólogos? Con relación a las anormalidades
detectadas mediante técnicas
de imagenología diagnóstica en los cerebros de los
llamados esquizofrénicos, surgen enseguida dos
inquietudes:

a) ¿Esas anomalías son causa o consecuencia de
la conducta anormal?

b) Si la esquizofrenia es una enfermedad del cerebro como,
digamos, la enfermedad de Parkinson , o
la enfermedad de Alzheimer, o
la esclerosis múltiple, ¿ cómo es que en
muchos países hay leyes especiales
de salud mental que
obligan al internamiento o al tratamiento forzado de los llamados
esquizofrénicos? Que yo sepa, no hay leyes especiales para
el tratamiento coercitivo de las pacientes con Parkinson,
Alzheimer y esclerosis múltiple.

Al señalar que la esquizofrenia es parte del mito moderno
de la enfermedad mental, tampoco estoy negando la existencia de
la locura. De hecho, la locura abunda dentro y fuera de los
manicomios( ahora llamados hospitales mentales). Lo que estoy
cuestionando es la veracidad científica de categorizarla y
tratarla como una enfermedad legítima tan curable como una
apendicitis o una neumonía. La locura, en su sentido
clásico y literario, es más bien un asunto personal (locura
individual) o político(locura colectiva).

3. El crimen y la violencia. El
concepto
psiquiátrico del crimen surgió en el siglo XX con
la publicación de "El criminal, el juez y el
público"(1929), de F. Alexander y H. Staub. Para estos
autores, había dos clases de criminales: el normal y el
anormal. Para el normal la penología tradicional era
suficiente, en tanto que, para el anormal, Alexander y Staub
recomendaban la abolición de los castigos y la
implantación de tratamientos psiquiátricos.

Es importante tener en cuenta que esta tesis
nació en la época del ascenso al poder de las
ideologías totalitarias de la Italia fascista,
la Alemania nazi
y la Unión Soviética comunista, en las que los
psiquiatras estaban dispuestos a cooperar con gobiernos
dictatoriales en la represión de los ciudadanos.

Por su parte, Thomas Szasz, desde la publicación de "El
derecho, la libertad y la
psiquiatría"(1963), ha advertido que la Psiquiatría
Institucional se ha convertido en una agencia represiva de
control social
.

Esta psiquiatrización del crimen ha dado origen al mito
del paciente mental peligroso: con bastante frecuencia los
medios masivos
de comunicación informan sobre un crimen al
que, enseguida y tras la entrevista
a un psiquiatra o psicólogo, se le endilga el calificativo
de trastorno mental. Aunque no hay ninguna evidencia de que los
llamados pacientes psiquiátricos son más peligrosos
que los normales(la situación actual apunta más
bien a todo lo contrario), el mito del paciente mental peligroso
se resiste a morir.

4. El consumo de
drogas legales
e ilegales. Aunque la humanidad ha usado(y abusado de) drogas
tales como el alcohol, la
coca, la marihuana, el
opio y sus derivados, y el tabaco durante
siglos, el llamado problema de la droga, o
drogadicción, o farmacodependencia, o abuso de drogas fue una
creación del siglo XX con la promulgación de las
primeras leyes antidrogas , y la inclusión del uso de
ciertas drogas en la lista oficial de trastornos mentales de la
Asociación Psiquiátrica Americana. Hasta ese
entonces, no teníamos el llamado problema de la droga, ni
la palabra drogadicción tenía la connotación
peyorativa que hoy tiene. (De hecho, adicción quiere decir
apego, dedicación como cuando decimos que Fulano es adicto
al Partido Liberal, o Mengano es adicto al catolicismo).

Décadas más tarde, la guerra
antidrogas, supuestamente ejecutada para erradicar el consumo, es
llevada a cabo con tanta insensatez y ferocidad que sus terribles
consecuencias(un ambiente de
persecución inquisitorial, criminalidad, corrupción, daño
ecológico y toxicidad agregada por la impureza) han
terminado por afectar a toda la sociedad. Pero
en vez de atribuir estas nefastas consecuencias a la ilegalidad y
la guerra, los gobiernos las achacan a las drogas ,
los drogadictos y los traficantes.

Por mi parte, sugiero que prohibir ciertas drogas porque su
abuso puede ser dañino para la salud es tan sensato como
prohibir los automóviles porque su abuso puede ser
perjudicial para la salud, y postulo que la guerra antidrogas nos
está haciendo más daño que la denominada
drogadicción. Por consiguiente el asunto no es cómo
acabar con las drogas y los drogadictos sin cómo acabar
con la persecución y la guerra.

5. Los conflictos
personales e interpersonales. Por último, cuando seguimos
hablando de trastornos mentales, tenemos en mente otros tipos de
hechos: los conflictos personales e interpersonales tales como la
angustia, el desempleo, las
dificultades o desviaciones sexuales, la discordia marital o
familiar, la estupidez, las fobias, la incultura, las
inhibiciones y demás problemas de
la condición humana. Se piensa entonces que la vida es
armónica y que los conflictos son causados por
psicopatologías subyacentes que es preciso curar para ser
felices. Esta es la versión pseudocientífica actual
de la psiquiatría y la psicología
clínica convencionales. No obstante,me parece más
realista aceptar de una vez por todas que la vida es, en
sí, una ardua tragicomedia, y que lo que llamamos salud
mental(que prefiero llamar virtud o salud espiritual) es un largo
y tortuoso camino de aprendizaje
cotidiano.

CONCLUSIONES

La historia de
la ciencia
está llena de teorías
y modelos que
fueron descartados una vez que se lograron avances que
permitieron un conocimiento
preciso de los fenómenos. No veo por qué no va a
ocurrir lo mismo con la teoría
de la enfermedad mental. Nos corresponde a los científicos
la responsabilidad
social de revisar crítica
y constantemente el estado de
nuestros conocimientos para así ponernos al día en
nuestra labor.

La teoría de la enfermedad mental tuvo, pues, su
utilidad
histórica hasta el siglo pasado pero es, en la actualidad,
científica y médicamente anticuada pues permite
diagnosticar y tratar como enfermos mentales a pacientes con
enfermedades cerebrales o de otro tipo que cursan con trastornos
involuntarios de conducta; y es moral y
políticamente dañina porque se ha vuelto una
cortina de humo para toda una serie de problemas
económicos, existenciales, morales y políticos que,
estrictamente hablando, no requieren terapias médicas sino
alternativas económicas, existenciales, morales y políticas.

REFERENCIAS

Gómez, F.L." El mito de la enfermedad mental", en "La
libertad y el psicoanálisis". Barranquilla: Editorial
Antillas; 1998.

Gómez, F.L. "El mito científico de la enfermedad
mental", en "Asilo de cuerdos". Barranquilla: Editorial Antillas;
2000.

Gómez, F.L. "La enfermedad mental: ¿mito o
realidad?", en http://www.opinatio.com (5 de mayo de 2004).

Szasz, T.S. "The Myth of Mental Illness", 2nd edition. New
York: Harper & Row, 1974.

Szasz, T.S. "The Manufacture of Madness: A Comparative Study
of the Inquisition and the Mental Health Movement." New York:
Harper & Row; 1970.

http://pr.indymedia.org/news/2004/08/4411.php

Aug. 22, 2004 at 9:14 PM

Autor

Fernando Luis Gómez

Médico psicoanalista en práctica privada, y
Profesor de
Biología y
Neurofisiología, Facultad de Psicología,
Corporación Universitaria de la Costa.

Barranquilla, Colombia

TEL. (57-5)3561982

Partes: 1, 2
 Página anterior Volver al principio del trabajoPágina siguiente 

Nota al lector: es posible que esta página no contenga todos los componentes del trabajo original (pies de página, avanzadas formulas matemáticas, esquemas o tablas complejas, etc.). Recuerde que para ver el trabajo en su versión original completa, puede descargarlo desde el menú superior.

Todos los documentos disponibles en este sitio expresan los puntos de vista de sus respectivos autores y no de Monografias.com. El objetivo de Monografias.com es poner el conocimiento a disposición de toda su comunidad. Queda bajo la responsabilidad de cada lector el eventual uso que se le de a esta información. Asimismo, es obligatoria la cita del autor del contenido y de Monografias.com como fuentes de información.

Categorias
Newsletter